SE CERRÓ LA HABITACIÓN 501

Agradecimientos son los que quedan después de una temporada escénica como la de La Habitación 501; gracias a toda la gente que hizo parte del proyecto teatral, gracias al público que disfrutó de la propuesta y que hizo realidad durante tres meses el sueño del Teatro Vivo en la ciudad de Bogotá.

La Habitación 501 cerró con un positivo saldo su temporada: Los mejores comentarios del público que visitó la Casa; el más sentido apoyo de la prensa al proyecto escénico; un gran esfuerzo artístico por parte de la dirección al convocar a un elenco que a medida que pasaba el tiempo de la temporada se desgastaba por su propia coyuntura social; a los actores que comprometieron su ser artista y lo mantuvieron hasta el final entregándole a la Compañía las primeras caras de los guerreros del arte vivo para la sede de la Compañia en la ciudad... el Teatro Vivo nació en Bogotá en medio de la polémica de un proyecto que nació para triunfar...

Esperamos más de la Compañía en Bogotá y estamos seguros que un nuevo teatro comenzó a tomar forma en la capital del país.

AGRADECIMIENTOS
Desde la dirección general del proyecto quiero extender agradecimientos sentidos por el gran trabajo artístico que se llevó a cabo en el desarrollo de esta temporada teatral a todo el grupo de personas que hizo posible este sueño:

A Orlando, productor de la obra por hacer posible hasta el final el sueño de los verdaderos Guerreros del Arte, gracias por la lucha, pues como dicen por ahí "Cuando todo sale bien es culpa de los artistas, cuando todo sale mal es culpa de la producción..."

A Rocío por encarar el duro escenario de la dirección en un ambiente de actores cambiantes; por darlo todo para que el producto artístico fuera una realidad artística perfecta para el público.

A Fernanda, por ser cabeza del proyecto en Bogotá, por su inteligencia y pertinencia en las decisiones... por hacer sostenible la Temporada, por creer en este sueño de todos.

A mi madre, a María Antonia por siempre ser parte del equipo, por su alo protector, por ayudarme a construir el camino artístico.

A Andrea por medírsele al reto del sacerdocio y creer en el arte en un país que no sueña con artistas...

A Juan Carlos y a Waldina por viajar a construir el sueño en Bogotá, por su ayuda permanente, por ser el centro de la Compañía a pesar de los díficiles días... gracias por la vida en el arte...

A Verónica, gracias por ser la protagonista de la obra, por tu talento sin condición, por la integralidad y la inteligencia.... gracias por esa Merced Hermann insuperable...

A Edgardo, Erika, Luisa Ulloa, Diego Celis, Raúl, Duván, David, Beatriz, Liseth, Marcos, Francisco por ser parte fundamental del proceso creativo del Teatro Vivo, por su carisma y su talento... por esos grandes personajes vivos...

A Angie y Elkin por su compañía y apoyo en los momentos difíciles, a mi padre por su respaldo y a mi hermano por su visión...

A todos gracias por ser parte del proyecto artístico La Habitación 501... el nacimiento del Teatro Vivo en Bogotá. Esperen muy pronto noticias de un nuevo nacimiento vivo para las artes escénicas...

Mauricio Suárez S
Director General H501

11 comentarios:

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  2. Antes que nada quiero agradecer a La Compañía Tetro Vivo de Colombia, por permitirme conocer una forma de hacer teatro que me llena completamente y me permite estar en permanente crecimiento.

    Mauricio yo también recuerdo el casting (el primer día que nos vimos), no se que pensaron tú y Fernanda que estaba también allí, pero para mí fue experimentar por primera vez, que era posible hacer una de las cosas que mas me gusta en la vida “teatro”. Como lo he dicho en varias oportunidades estar dentro de la compañía fue más de lo que esperaba, conocerte me abrió la mente a un mundo de posibilidades, que no conocía, tu visión, tu constancia, tu convicción, fueron alicientes permanentes para mí y mi trabajo. Debo confesar que mi ego fue un poco golpeado cuando me entregaste el perfil de Miranda y no de Merced, pero quien iba a creer que Miranda fuera tan especial para mí y que después la extrañara tanto, mucho menos me imaginé que resultaría interpretando a Merced, que buenos momentos pasé dentro de la casa desde el 1 de mayo hasta el 15 de noviembre. (Espero de todo corazón sean muchos más). Para ti sólo GRACIAS, INFINITAS GRACIAS. Sigue contando conmigo.

    La compañía se ha convertido en parte de mi vida y espero que la compañía me necesite tanto como yo a ella, sólo allí hubiera sido posible la magia de un universo maravilloso, donde personajes indescriptibles de desarrollaron, cada uno con su propia genialidad; sólo allí fue posible soñar despierta y hacer mis sueños realidad; sólo allí es posible seguir siendo feliz con el teatro.

    Creo en tu sueño y es, ahora, el mío propio. Quiero seguir en el frente de batalla, quiero crecer como una guerrera capaz de levantarme ante el feroz embate de la guerra, quiero tener una coraza de acero pero a la vez una piel cambiante, quiero un corazón de león y que al mismo tiempo sea como un esponja (que absorba que lo que le permite sentir y exprima lo que no me deja crecer), quiero hacer una carrera sin ser un diva, pero ser la mejor, quiero seguir formando parte de la Compañía , de la Casa Teatro de Bogotá.



    Roció, mi admiración por ti es infinita, el mejor ejemplo de una guerrera del arte. Muy pocas veces he querido ser como alguien, pero cómo me gustaría tener tu temple, tu empuje, tu entrega, TU TALENTO. Desde que llegaste aquí imprimiste en todos una impresionante fuerza de trabajo, en gran parte la experimentación en carne propia del teatro vivo, se hizo a través de tu voz, de cuerpo de tu piel, porque tú respiras teatro y vivo y a mí me lo trasmitiste todo el tiempo, nunca te rindes y aunque el cuerpo no de mas, tú estás siempre ahí, aunque el corazón esté de cuadritos tú estás ahí. Muchas, un montón de GRACIAS. No sabes como me gustaría que continuaras haciendo teatro vivo aquí en Bogotá, te necesitamos mucho.



    Fernanda muchas gracias por todo lo que hiciste, siento que tú desde el comienzo creíste en mí, no sabes lo importante que ha sido, para mí, tu apoyo constante. Se que te esforzaste mucho para sacar la obra adelante y estuviste al pie del cañón frente a todos nosotros, se necesita mucha entereza para hablar las cosas como son, sin basilar. Creo que al asumir un proyecto así se corren riesgos, pero se aprende mucho sobre la marcha.

    Orlando, aunque las cosas no fueron lo que se esperaban se luchó por mantener en pie La Habitación 501, el mayor tiempo posible, se que cuando todo se normalice, La Casa Teatro de Bogotá resurgirá con nueva fuerza, este tiempo no nos ha dejado más que aprendizaje, buenas experiencias, un mar de posibilidades.

    A todos los que nos ayudaron siempre Waldina, Juan Carlos, María Antonia, el señor Jesús, Jorge, Angie (alias Hasbun), Pollito feliz, sin ustedes no habría sido posible. Un millón de gracias.

    A mis queridos compañeros, a los que están, los que estuvieron y los que se quedaran: Compartir este tiempo con ustedes ha sido alucinante, admiro la fuerza de los que supieron resistir a pesar de la adversidad, a los que desistieron el camino les digo que la vida esta llena de aprendizaje y sólo hay que quedarse con lo que nos permite ser mejores cada vez y espero sigamos creyendo en este sueño del teatro (cada uno a su manera), a los que estaban en la última función (de este año) le agradezco mucho porque entre todos permitimos que la obra viviera unos día más, con nuestras esperanzas y nuestros deseos.

    Espero no vayan a creer que esto es una despedida, es sólo como dijo un@ de mis compañer@s una manera de cerrar este segundo ciclo de La Habitación 501 (por primera vez en Bogotá). Cómo le dije a Mauricio el sábado nuestro entusiasmo era por la convicción de haber hecho un buen trabajo (con sus altibajos), al cual amamos, sabiendo que es mejor prevenir que sanar las heridas, pues tal vez si hubiésemos continuado se habrían generado heridas difíciles de curar o tal vez en algunos habrían quedado cicatrices y para que la compañía sea lo que todos queremos debe resurgir libre de contrariedades. Pienso que si el ánimo hubiera sido otro el día del cierre sólo habríamos visto lo negativo y no todo lo bueno que nos entregó, a cada uno de nosotros el teatro vivo.

    Bueno y ahora que sigue, ¿cómo vamos a continuar las labores este año? ¿o vamos a reiniciar el año entrante? ¡¡Por favor manténgame informada de los planes de la compañía para continuar aquí!!
    Un abrazo para todos!!!

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  3. La mejor obra en la que he podido trabajar, los mejores comentarios, las mejores vivencias, los mejores compañeros, la mejor dirección. Crecimiento, aprendizage, busqueda, sueños, todo... Que más puedo decir.

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  5. pues la verdad me gustaria agradecer a todos ya que cada uno haci hubiera sido lo mas minimo me enseño algo pero en especial a Mauricio y Rocio por la paciencia que me tubieron y pues solo espero que vengas mas cosas para casa teatro haci que esperare noticias.

    Besitos a todos y los KELO UN MONTON

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  6. Gracias por los comentarios recibidos, nos llenan de ilusión para seguir adelante... Las actividades de la Compañía por este año no han cesado, SEA BIENVENIDA "LA SOSPECHA"

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  7. también hice parte de este sueño
    desafortunadamente tuve que salir, pero igualmente los llevo en el corazón, un saludo a todos.

    UN APLAUSO PARA EL TEATRO VIVO DE COLOMBIA!

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  8. JUM! NO ME SALIÓ EL NOMBRE

    LUISA ARTEAGA
    (ANTERIOR COMENTARIO)

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  9. Es una pena que la obra se haya cerrado, iba a ir con unos familiares que vienen de Estados Unidos en diciembre que son fanaticos del terror y saben mucho de este tipo de espectáculos, y por lo que les comenté de la Habitación 501, les pareció novedosa y tenian muchas ganas de ir. Qué pena será en otra ocuasión, cuando vuelven a abrir otra obra?

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  10. Sí, acabó la Habitación 501, pero empezó en todos nosotros un proceso de reflexión..de todo lo aprendido, de todo lo hecho para bien y para mal....de todo lo compartido....de todo lo logrado en nuestro trabajo como artistas de La Casa Teatro de Bogotá...y sólo dentro de nosotros podremos encontrar las verdaderas respuestas a ese proceso vivido ahí.
    Hablando desde mi experiencia podría decir que de esta Casa se va una provinciana un poco agobiada por los sucesos que antecedieron el cierre de la obra. Sucesos que de una u otra manera nos obligaron a tomar decisiones acertadas y desacertadas, tanto a ustedes como a nosotros...
    No quiero con esto iniciar una discusión de quien podría tener la culpa del cierre de la obra, no...quisiera aclarar simplemente que los esfuerzos, a pesar de las advercidades, estuvieron siempre presentes...
    Todavía recuerdo el primer día que me encontré con cada uno de los personajes de la obra y los días siguientes, con los que terminarían de conformar el elenco incluso una semana antes de cerrarce el espectáculo, caras nuevas, talentos por descubrir, personajes empezando a crecer...
    Con el primero que tuve contacto, lo recuerdo muy bien, fue con Leonel Arantes...el agente Muñoz, quien se estrelló de frente y sin previo aviso con la Coronel Cuchillo....uhhmmm vaya encuentro!!Recien desempacadita de la provincia a la capital y con todas las ganas de iniciar el trabajo psicodramático en la Casa Teatro de Bogotá con los diferentes nucleos dramatúrgicos de la obra:La familia Cuervo y los empleados de la misma, la Federación de Investigación Nacional la FIN, los miembros de La Fundación Bartolomé (personal médico y enfermos), la Orden del Magnífico Gabriel y por último la señora Guillerma Buenaventura...5 posibilidades para el psicodrama en la Casa, pero infinidad de recuerdos en las vivencias de cada una de ellas..

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  11. CONTINUACIÓN

    ...vivencias que quedaron guardadas en nuestros corazones y que dificilmente podrán ser borradas...se necesitaría mucho más que un choque con el concepto del psicodrama o en el peor de los casos, una inconformidad en los pagos...porque estoy segura que los que se fueron del proyecto por una u otra razón nunca van a olvidar lo que vivieron VIVIENDO EL TEATRO VIVO.
    Y es que hay una gran magia que encierra a los que conocemos de éste proyecto escénico...la nostalgia nunca muere, siempre permanece...siempre tendremos algo que contar, algo que recordar en cualquier lugar donde nos encontremos...porque yo de igual manera recuerdo a los que abandonaron el barco en medio de la tormenta, como en alguna ocasión lo escribí, que a los que permanecieron poniéndole el pecho a las grandes olas que trataron a toda costa de hundirnos.
    Todos en alguna ocasión fuimos guerreros, sólo que algunos cayeron en la primera batalla. Otros que se quedaron un poco heridos por los impactos, bajaron la guardia rapidamente y entonces empezaron a desfallecer, disminuyendo de esta manera el compromiso, la disciplina, la puntualidad, la entrega, la pasión...de ahí el motivo de mi agobio. Sé que algunos van a decir que lo importante fue que culminaron lo que empezaron, pero yo les pregunto a aquellos..¿esa era la forma de terminar algo a lo que nos comprometimos con el corazón?...En este momento recuerdo uno de los ejercicios practicados en la rutina de entrenamiento...el de los brazos extendidos a la altura de los hombros en forma horizontal...muchos bajaron los brazos, no aguantaron tanto tiempo. Otros los mantuvieron arriba, pero no a la altura de los hombros como debía ser. Unos pocos los mantuvieron extendidos en forma horizontal y siempre a la altura de los hombros a pesar del dolor...
    Pero lo importante es que todo es aprendizaje y yo aprendí montones de todos en Bogotá, desde el primero que conocí, los muchos que pasaron por el proyecto, hasta la última que conformo el elenco, Daniela Ulloa.
    Regreso a la cuna del Teatro Vivo muy orgullosa de haber puesto un granito de arena para que otro sector del país lo conociera.
    Mis agradecimientos sinceros y con el alma a todos los que me permitieron COMPARTIR Y APRENDER, tanto del público, la producción como de los actores.
    A la buena energía y al apoyo que siempre recibí de la Compañía en Popayán.
    A Verónica por ser una guerrera del arte y por esas palabras que reconfortan mi trabajo artístico.
    A la familia de Mauricio por acogerme como un miembro más de la familia. Los momentos fuera de mi casa en Popa se hicieron muy llevaderos gracias a su calor, a su cariño y a su apoyo. Mil y mil gracias Maria A. y Fernanda.
    A Orlando que siempre le ha apostado a mi trabajo en la Compañía.
    A Andrea por su compañía, su comprensión, su alegría. No hubiese sido igual sin ella en la Casa.
    Y por último el agradecimiento al gran artífice de todo este sueño, a quien le debo lo que sé, porque todo lo he aprendido de él. Cada día que pasa me sorprende más su inteligencia, su entrega y su forma de asumir los sueños de muchos en el arte y no de cualquier manera sino siempre buscando y enseñándonos la perfección.
    Gracias Mauricio por todo lo que me enseñas en cada experiencia compartida.
    A los actores de la Compañía Teatro en Bogotá sólo me queda decirles que tienen a un gran MAESTRO, que no lo desaprovechen, que no se dejen apacigüar por nada ni por nadie, que traten de sacarle el jugo al máximo al señor Director de la Compañía de Teatro más grande y mejor de Colombia.

    Espero no olviden a esta provinciana que vino desde tan lejos a ayudarlos a interpretar -literalmente - a punta de correa.

    A todos los llevo en el corazón, espero regresar pronto y encontrarme al final del camino con GRANDES ARTISTAS...!!!!!!!!

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Bienvendio a la Casa Teatro de Bogotá

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